Casa Rural Juangoxenea - Ihaben, Navarra

Ly Martin

Hemos pasado 5 días un grupo de amigos en una casa con un encanto especial. Dispone de todo lo necesario para estar como en casa pero en un entorno increíble. Las habitaciones disponen de baño cada una y ventanas con vistas a los prados llenos de ovejas, todo nuevo. Sin duda volveremos.

Arnau Colomar

Casa rural situado en un sitio muy tranquilo y agradable. La casa está recién reformada, muy bien equipada y espaciosa para 10 personas. Todas las habitaciones grandes y con baño propio. La cocina y salón muy amplios.
Además nos dejaron preñarado ñara hacer fuego tanto en ximeneo como carbón para hacer torrada.

Muy recomendable

Jose “JOSELE”

La casa está fabulosa, la distribución en una planta está dada a reuniones cómodas en el salón y cocina todo junto. Tiene juegos para todos. Zona super tranquila y cerca de muchos sitios bonitos para ver. Los pilares de madera te asombran por el tamaño.
A todo esto hay que añadirle la preocupación constante de que estés a gusto por parte de Goreti y su familia. Si pides un cabrito asado en las cercanías llama su Aita para que te traten muy bien.
Doy fe de que le hacen caso (riquísiiiiiiimo).
Gracias Goreti, un abrazo

Anfiloquio Cidad Albilla

Casa rural en un entorno tranquilo y rodeado de hayedos. Habitaciones espaciosas todas ellas con baño incluido, y un enorme salon con una cocina totalmente equipada. Todo, en el interior, es practicamente nuevo, com detalles muy cuidados. El caserio esta restaurado respetando la piedra y el entramado de vigas y columnas de roble.
En definitiva, una opcion a tener muy en cuenta para perderse, descansar y descubrir el entorno rural navarro.

Ireber Gorria Juarez

Una estancia maravillosa. A la casa no le falta detalle, super bonita y acogedora con todas las habitaciones en la misma planta. Goreti suuuuper atenta. Hemos disfrutado muchísimo y repetiremos en breve.

Jon Ander Fernandez

Increíble. Casa rural nueva, a detalle para grupos de hasta 10 personas. Tiene todo lo necesario, y el entorno es espectacular.
Gracias!!!!

Amador Martínez Santiago

Hemos estado este fin de semana alojados un grupo de amigos con motivo de la Behobia-San Sebastián y la experiencia no ha podido ser mejor.
Te sientes en tu propia casa 5 minutos después de haber entrado. Se nota que la casa se ha reformado no hace mucho y que se ha hecho con cariño y pensando en los que se alojen. Habitaciones cómodas, muy espaciosas y con baños individuales en cada una de ellas.. Comedor y cocina gigantescos y un salón con sofás suficientes para que todos los huespedes puedan estar juntos.
Si a eso le incluyes la amabilidad total de los dueños, lo tienes todo.
Mención aparte al queso y nueces locales gentileza de los dueños
Sin duda, un lugar absolutamente recomendable.

Yolanda Santos

Desde que cruzas el umbral de la puerta la sensación que te invade es la de estar en tu propia casa. Una casa acogedora, cálida, totalmente preparada para cumplir los objetivos de descanso, tranquilidad y comodidad. No falta detalle en cualquiera de sus estancias, hasta el más pequeño que te puedas imaginar, para cuidar su objetivo.
En su propósito de que los huéspedes estén a gusto, Goretti se preocupa de estar dispuesta para que la puedas llamar en cualquier momento y así poder guiarte en las necesidades que tengas, restaurantes, productos locales, rutas por los montes, visitas a realizar, etc..
Si le puede parecer poco estas atenciones, deja una muestra de ello. A la llegada encuentras un queso y unas nueces de la zona espectaculares.
Goretti se ocupa de que tengas dispuesto todo lo necesario tanto para poder comer en el jardín, con su barbacoa, tumbonas, mesas de jardín, paelleras, etc.…. Para épocas más frías la chimenea de la zona común la encuentras preparada y con leña suficiente por si quieres caldear esa zona común. El sillón de la sala de estar te invita a reunirte en grupo y disfrutar de un buen vino alrededor de la mesa y su chimenea.
He estado en muchas casa rurales, pero esta ha dejado el listado muy alto. Impactados por el fin de semana que hemos pasado. Repetir se va a convertir en una obligación para descansar y disfrutar.