Cortijo La Algallumbilla - Carcabuey, Córdoba

Carlos T.

Increible lugar, mágico al lado de las montañas con muchas rutas para recorrer que salen cerca de la casa. Tiene 2 burros, piscina barbacoa y horno para disfrutar con amigos y familia. Lo mejor de todo, el trato, nos dejó la casa preparada con la chimenea encendida y un trato excelente. Gente así da gusto conocer, repetiremos sin duda! Muchas gracias.

Thalyne M.

La experiencia bien, es un sitio tranquilo, no hay vecinos alrededor y se puede estás bastante tranquilo. Hay un par de burros a que ver y un entorno agradable.

La casa no está mal aunque el salón es poco cómodo, si vas en invierno y te apetece estar dentro del salón y cómodo, no recomendable. Las habitaciones amplias, todas con su aire acondicionado y las camas medianamente bien.

La limpieza lo básico: sábanas y toallas limpias y una limpieza por encima. Luego veías la parte debajo de las sillas y casi había un nido de arañas con la cantidad de tela araña que había, igual que en el techo también habían bastante telas arañas.
Lo mismo con la piscina, le falta un buen mantenimiento, el agua se veía grasosa y los bordes de la piscina se estaban cayendo por falta de mantenimiento.

A los que tienen fobia de insectos: allí hay 183739 tipos diferentes, no es culpa del dueño obviamente, pero que sepan que hay muchísimos insectos y arañas.
En la casa falta que las ventanas tuviesen una mosquetera porque entran miles de moscas dentro y están todo el tiempo dando por culo.

José M.

La atención de Casti es estupenda, lo tiene todo preparado para que a los huéspedes no les falte de nada. Las habitaciones son cómodas, todas con toallas, camas vestidas, armarios, TV y aire acondicionado con bomba de calor. Los espacios exteriores son también muy agradables, con toldos para el verano, mesas de sobra, sillas, barbacoa, horno de leña, equipo de sonido, botelleros que enfrían súper rápido, piscina… tres aseos (uno de ellos fuera) y dos baños, piscina, wifi vía satélite para compensar la escasa cobertura y una chimenea estupenda en la cocina con leña disponible más que de sobra. Todo es eléctrico, nada va a gas (salvo es rosco para cocinar de fuera), y el termo del agua caliente da de sobra para todos los huéspedes. Hay aparcamiento de sobra para 6-8 coches, y en la parte de abajo tienen gallinas, perdices, un par de burros y hasta un faisán. Un sitio muy tranquilo e íntimo, sin duda para volver. La única “pega” es que hay que llevarse la basura que se genera durante la estancia, aunque bien pensado es una pega muy educativa.

Patri B.

El mejor lugar para una escapada rural! El entorno maravilloso, el Cortijo está impoluto y muy bien cuidado, la atención de Casti no puede ser mejor. Nosotros provechamos para realizar rafting en el río Genil, y pasamos unos días de descanso y desconexion entre amigos, disfrutando de la piscina, el horno de leña, la barbacoa, las terrazas. Todo perfecto. Sin duda repetiremos!

Antonio S. C.

Estupendo cortijo en un entorno natural y tranquilo. Cuenta con todas las comodidades y la atención por parte de los dueños es magnífica. Magnífica barbacoa y horno de leña. Zona muy amplia al aire libre y preciosas vistas en todo el entorno.

M.Mar E.

Una casa rural acogedora, con todo lo necesario para pasar unos días en familia o con amigos: piscina, zona de columpios, jardín, terrazas, horno de leña, barbacoa... El entorno, además, es muy agradable.
La disfrutamos a tope un fin de semana lluvioso por lo que nos encantaría volver para disfrutar ahora de sus espléndidos exteriores.

Irene C.

Es una casa encantadora. Estuvimos allí para pasar el puente de los santos.
Está súper bien equipada de vajilla, mantas, toallas, leña, etc.
El exterior es chulísimo, con burritos y pájaros, no soy muy entendida pero creo que hasta un faisán dorado.
No pudimos estar mucho fuera por qué diluviaba, así que ni barbacoa, ni piscina. Pero sí el horno de leña para hacer pizzas.
Volveremos seguro con el buen tiempo.
La única pega, en el baño de arriba apestaban las tuberías, al ir usándolo el olor bajó, pero eso es una pena, con lo bonito que es todo.
El primer día por la noche salieron cucarachas de esas que vuelan, supongo que es lo que tiene estar en el campo, las barrimos y sin problema.
La casera super amable.
Un lugar muy muy recomendable.

Rocio L.

Una casa estupenda para pasar unos días en la naturaleza y desconectar. La casa está muy cuidada y limpia. Dispone de amplios espacios al aire libre y muchos rincones donde esconderse del sol o tomarlo (¡depende de la época del año!)